Una batalla perpetua


 

 

Cada día una batalla. Pero no una diferente, la misma una y otra vez. Es una guerra continua donde cada día te levantas sabiendo que vas a tener que luchar contra el mismo monstruo. Que al acabar el día no has podido con él, y te vas a descansar un rato y para volver a intentarlo al día siguiente.

Un monstruo que venciste una vez, y que cuando creías que podías pasear tranquilamente y sin miedo, un día de repente vuelve y destroza todo lo que construiste con mucho cuidado y mimo. Y tienes que vencerlo, viendo como sigue destrozándolo todo, para volver a construirlo de nuevo.

Cuesta vencer a la ansiedad, pero cuesta todavía más tener que hacerlo de nuevo.

 

[Texto e imagen propias protegidas con derechos. Cualquier copia sin autorización se considerará un delito. Si ves este contenido en otras personas, te ruego te pongas en contacto conmigo. ¡Muchas gracias!]

Comentarios